Las Encartaciones es una comarca de Bizkaia con gran riqueza histórica, gastronómica y cultural donde se puede disfrutar de excursiones en plena naturaleza, visitas a museos o paseos por las calles de sus magníficos pueblos.
Hoy os llevo al municipio de Güeñes para mostraros un museo muy especial, tanto por el contenido como por el continente. Se trata del parque ARENATZarte propiedad del Ayuntamiento que, desde el año 2007, fusiona la naturaleza y el arte.
Los niños disponen de una zona para dar rienda suelta a sus juegos e imaginar historias subidos a un colorido castillo. Fuentes y aseos son otros elementos de los que dispone este parque.
Un edificio acristalado a la entrada sirve como lugar de exposiciones itinerantes, charlas o talleres. Además, es la sede del mítico certamen de Vestidos de Papel de Güeñes que se celebra desde 1958 y está consideradocomo uno de los más importantes del país.
En sus 22000 m2 de extensión, este jardín es el orgullo de sus vecinos; un espacio donde sentarse en alguno de sus bancos y admirar la gran variedad de especies arbóreas, algunas centenarias como su gran secuoya traída en barco desde Ámerica a petición del que fue propietario de la finca, Leandro Urrutia, natural de Galdamés.
Leandro fue un importante empresario del sector del algodón que se enriqueció en Méjico en el siglo XIX. No llegó a ver terminada esta mansión ya que falleció un año antes de su inauguración y fue su esposa quien se encargó de que finalizaran las obras y le dotó del aire romántico que todavía posee.
La elegante casona es, en la actualidad y desde el año 1974,sede del Ayuntamiento de Güeñes.
La finca cuenta con una pérgola que nos lleva a imaginar otros tiempos donde las damas pasearían con elegantes vestidos observando las flores de los parterres o el estanque que, en el momento en que yolo visité, se encontraba vacío.
En una propiedad de estas características no puede faltar la casa del jardinero y la casa de caza, aunque ya no se utilicen para lo que fueron construidas sino como aulas municipales.
Pero, sin duda, los grandes protagonistas son los árboles y las esculturas. Acacias, cedros, arces…se mezclan con curiosas obras de artistas como Jon Stone, Mari JoseRecalde, Mikel Lertxundi o los hermanos Ruscobas quienes idearon cinco figuras de más tres metros de altura con aspecto de cabezas totémicas que representan, a modo de simbolismo, la protección del parque.
Y si os habéis quedado con ganas de naturaleza, a pocos metros cruzando la carretera general, encontraréis un camino que parte desde la estación de tren de FEVE hasta Sodupe y que es una de las denominadas vías verdes.
Normalmente estas sendas no revisten ninguna dificultad por lo que son ideales para realizar con niños e introducirles en el mundo del senderismo.
A pesar de que la anchura es suficiente y el piso está asfaltado, son pocos los vehículos que circulan por este antiguo trazado del FFCC de la Robla.
Es habitual cruzarse con personas vestidas de manera deportiva y bastantes ciclistas que eligen esta ruta más tranquila y segura que la carretera nacional.
El camino discurre por la margen derecha del río Herrerías donde te puedes encontrar con un área de recreo que dispone de bancos y mesas; varios caseríos, algunos muy deteriorados y otros perfectamente reformados. Después de unos minutos se llega al barrio Santxosolo donde se sitúa la ermita de San Martín de Iturriaga, más conocida con el nombre del barrio, y un albergue que, según me explican, se puede alquilar para estancias cortas.
Estas dos construcciones se sufragaron con un curioso impuesto que el Ayuntamiento instauró sobre el consumo de vino.
A poco más de un kilómetro de Sodupe, destino final de esta excursión, se halla una presa que suministraba agua a una antigua central hidroeléctrica, ahora en situación de abandono.
Al llegar a Sodupe una señal indica que el camino continúa varios kilómetros más hacia Arbuio, pero yo decido que seis kilómetros de ida y otros tantos de vuelta son suficientes para mí y regreso aGüeñes donde había estacionado el coche.
Como siempre os digo: no os quedéis en casa, salid de excursión.
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